La Presidenta de la Federación de Asociaciones Gitanas de Aragón, Pilar Clavería, recibió la Cruz de Oro de la Orden Civil de la Solidaridad Social de manos de la Reina como reconocimiento a su contribución en la mejora de las condiciones de vida del pueblo gitano, en especial, por su labor con la mujer y la escolarización de los niños.
Tras dedicar su juventud al cuidado de su numerosa familia (es madre de diez hijos), decide volcarse en la lucha por mejorar las condiciones de vida del pueblo gitano y para conseguir la integración social, a partir de dos pilares básicos: trabajo y vivienda dignos.
En 1990 es elegida Presidenta de la Asociación de Promoción Gitana de Zaragoza, siendo la primera mujer que ha llegado a dirigir su comunidad. Tras varios mandatos, fue elegida Presidenta de la Federación Aragonesa de Asociaciones Gitanas.
Combatiendo contra el paro y la discriminación, ha intentado ofrecer nuevas alternativas a los jóvenes, para alejarlos de la droga y la marginación, mediante la colaboración con otras asociaciones. Por otra parte, ha elaborado un programa de atención especial a la mujer gitana que incluye la creación de una asociación inscrita en el Instituto de la Mujer. Dicho plan se ocupa de dar formación a las mujeres gitanas así como de la creación de guarderías para favorecer su inserción en el mundo laboral.
Otra de sus preocupaciones es la escolarización plena de los niños de su comunidad y el reconocimiento legal de las bodas celebradas por el rito gitano.